Nivel óptimo de filtración

Para asegurar un nivel de filtración elevado y garantizar de este modo la seguridad de los usuarios de nuestros equipos, empleamos filtros con una clasificación mínima HEPA* H14 según el método MPPS (tamaño de partículas más penetrante – boceto a continuación) descrito en la norma EN 1822. La eficiencia mínima de un filtro H14 es del 99,995 % para este tamaño de partículas. También disponemos del filtro ULPA* U16, cuya eficiencia mínima alcanza el 99,99995 %.

La filtración molecular se centra en los contaminantes en forma de moléculas como COV (compuestos orgánicos volátiles), gases, vapores, etc. Las moléculas son retenidas mediante el fenómeno de adsorción, la propiedad que tienen los sólidos para fijar ciertos gases a su superficie.

Hace más de un siglo que el carbono activado se utiliza por sus propiedades excepcionales de adsorción.Existen diversos tipos de carbono activado que se emplean en la actualidad en múltiples aplicaciones como tratamiento de aguas, vertidos a la atmósfera, COV, recuperación de disolventes, etc.

Cada aplicación requiere un carbono activado adaptado.En Erlab, hemos desarrollado una gama única de carbonos activados dirigidos a la protección respiratoria del personal de laboratorio.

Contamos con un conjunto de especificaciones muy estrictas que engloban una serie de características como granulometría, densidad aparente, dureza o tasa de ceniza, que permiten seleccionar las materias primas y formularlas para garantizar la mejor adsorción posible en un espectro amplio de moléculas.
Dichas características se controlan de forma rigurosa en cumplimiento de los protocolos descritos en las normas internacionales (ASTM).

Sin embargo, el carbono activado no es el único factor que garantiza el rendimiento de la filtración. La eficiencia de un filtro molecular también depende de su instalación y de su uso.
De este modo, la conformidad de nuestras cabinas con la norma AFNOR NF X 15-211 asegura el rendimiento de filtración molecular.